lunes, 26 de enero de 2009

Andes

Y si me suelto,
y reflejo latitudes inconcientes
maniobrando dócil entre sombras.
Tal vez pueda vivirte, majestuosa,
en los Andes silenciosos y expectantes.
Libre,
deliciosamente angosta y contundente.
Elevando tempestades en curvas que revelan
sensaciones y sudor.
Y si me caigo,
al abismo maravilloso de tus brazos
sin abandonos, no alzaré la vista para verte.
Quiero sentir.
Viva.

2 comentarios:

Felipe Sérvulo dijo...

Me gusta tu poesía. Me hago seguidor tuyo y así vuelvo por aquí.

Soledad Vignolo Mansur dijo...

gracias, me gusta ser poeta, creo que me define, estuve asuente pero estoy publicando, paso por tu blog.